Esta preciosa paloma fue rescatada de la calle por su madrina, se hizo cargo de ella, la llevó al veterinario y tenia PMV, un virus típico de las palomas, así que la cuidó y mimó, hasta que ha estado lo suficientemente fuerte para venir al voladero del santuario, pues ya no es posible liberarla, pero aquí vivirá feliz con otros amigos de su especie.