Rudolf fue incautado de una rehala ilegal de perros procedentes de cazador hace muchos años, donde se sacaron muchos perros en muy mal estado, vivían hacinados y dormían encima de sus excrementos. Entre todos ellos varias cabras fueron decomisadas, como no en condiciones insalubres también, muy desnutridas, no iban a ser menos. Menos mal que todo aquello quedó atrás y fue como un mal sueño.